Solidago Preservado - Ramo - Rojo
Generalidades : Follajes preservados son naturales. Pueden existir variaciones de tamaño, forma y color entre diferentes elementos de la misma referencia. Algunas partes pueden presentar leves defectos (hojas dañadas, ramas cortadas...).
Humedad: Si el nivel de humedad circundante es demasiado alto, pueden salir algunas gotas de color del follaje. Evite ponerlo en contacto con material poroso para evitar que la planta se decolore.
Exposición a la luz/calor: La exposición prolongada del follaje al sol puede causar decoloración y secado del producto.
Evolución en el tiempo: Con el tiempo, la hiedra tiende a acurrucarse más o menos y su tallo se oscurece ligeramente.
Color del follaje: Colorante alimentario (no tóxico)
Un destello ardiente para tus creaciones florales
El Solidago estabilizado rojo es mucho más que un simple toque de color: es un auténtico espectáculo vegetal. Sus pequeñas flores, reunidas en densas panículas, presentan un degradado fascinante que oscila entre el rojo, el naranja y el amarillo. Una gama intensa, casi incandescente, que recuerda las hojas encendidas de los bosques en otoño, las tardes de tonos cobrizos o la llama temblorosa de una vela.
Esta riqueza cromática lo convierte en un aliado ideal para composiciones cálidas y envolventes. Combina de forma natural con tonos terrosos como el terracota, el marrón o el ocre. Asociado a flores estabilizadas en tonos amarillos o naranjas, crea una continuidad visual con profundidad. Para un contraste más marcado, combínalo con follajes en tonos fríos —como el eucalipto verde azulado o el ruscus verde oscuro— para resaltar aún más su luminosidad.
Una planta perfecta para proyectos de temporada
Con su silueta aérea y sus tonos ardientes, el Solidago rojo es ideal para todo tipo de creaciones inspiradas en el otoño. Encaja perfectamente en arreglos florales cálidos: centros de mesa para cenas de temporada, ramos festivos o coronas decorativas para colgar.
Su estructura ligera permite crear composiciones naturales y generosas sin sobrecargarlas. En guirnaldas, aporta movimiento y vitalidad. En ramos, se convierte en un acento luminoso que capta la atención sin eclipsar a las demás flores. Gracias a su flexibilidad, también puede usarse en prendidos, accesorios florales o como detalle decorativo sobre velas.
Una flor que cuenta una historia
El Solidago rojo no es solo decorativo. Evoca sensaciones, recuerdos, atmósferas. Su gama cromática recuerda las cosechas de finales del verano, las veladas junto al fuego o los interiores cálidos y acogedores.
Para los profesionales, también es una apuesta segura. Atrae la atención en tienda, realza un escaparate estacional y aporta carácter a colecciones temáticas. Su aspecto se mantiene con el tiempo sin necesidad de mantenimiento, conservando siempre su presencia vibrante y abundante.